Queridos seres humanos, compañeros de viaje en este momento de turbulencias exteriores y quietud interior!

Ahora más que nunca os invito a conectar con vuestro cuerpo extático, a generar vibraciones de amor, a mantener el sistema nervioso al día siendo vulnerables a la verdad interior y fuertes en amor.

Vosotros, a los que me he encontrado en cursos y sesiones siendo desgarradoramente honestos quitándoos máscaras y desacorazando vuestro corazón para dejar entrar al Ser que ahí habita, inocente, eterno, sabio y amoroso, os invito a vivir este regalo de encarnación con más totalidad que nunca celebrando la vida y la muerte, abriendo los brazos en confianza y colaboración con el momento presente con todo lo que trae.

Recuerda la amorosa mirada de la consciencia siempre presente enfocada ahora en ti.

Como no nos podemos encontrar físicamente este mes para compartir la belleza y calidez de nuestros preciosos cuerpos físicos, nos hemos unido a la comunión online. Digo comunión porque para mi es un desafío expandir el campo de mi consciencia para fundirme con el de cada uno de vosotros y sentiros más allá de la piel.

En la expansión del campo de consciencia se funden nuestros cuerpos individuales creando un campo de amor y presencia ¿Será esto el principio de la telepatía, de la comunicación sin palabras, de la comunión de almas? ¿Será el desafío que nos obliga a estirarnos más allá de lo conocido, el puente entre la vida encarnada y temporal y la existencia eterna de la consciencia y el amor sin forma?

Con gratitud a vuestra existencia, a la vida pulsando en cada uno de vosotros.

Con gratitud a Mónica que se ha estirado preparando todo lo que este mes os compartimos online y os presentamos a continuación.

Os abrazo así expandida y esponjosa y me cuelo en los espacio entre las células para danzar con vosotros el vacío.

Astiko