Sexo, eso que tanto nos satisface y tanto nos frustra

La visión del Tantra nos enseña a abrirnos a la energía vital  durante el sexo y a permitir que circule por todo el sistema glandular. Cuando todo el sistema está relajado y al mismo tiempo repleto de energía que circula libremente, podemos hablar de culminación, de éxtasis,…

La energía sexual es la raíz, el deseocuando se mueve haciael corazón nace la flor, el amorcuando se expande hacia la coronilla se despierta la consciencia, el aroma, el éxtasis…

Cuando hablamos de  hacer el amor, practicar el sexo, echarnos un polvo… ¿que es lo que realmente sucede…?¿desde el momento que se enciende el deseo hasta el momento en el que se apaga…?¿Desde la excitación y esperanza hasta la culminación o la frustración…? ¿Que es lo que buscamos, que esperamos, como lo vivimos, que sensaciones y sentimientos participan, cuanta energía somos capaces de recibir, sostener y permitir que recorra  todo nuestro cuerpo?¿Cuanto nos podemos relajar, abrir y entregarnos a recibir y a dar,… de una forma natural y confiada?

Se te ha ocurrido que la claves para tener una vida sexual plena, no dependen principalmente del tamaño, de la estética del cuerpo, de la técnica, de que lo hagas bien o mal, de lo sexy o rico y poderoso que parezcas…, si no de tu vitalidad, fluidez, de tu naturalidad, de tu entrega, de tu confianza, de tu relajación, de tu presencia, sin expectativas o exigencias, de tu esponjosidad, de tu fluidez…. de tu aceptación gozosa de lo que trae el momento, de permanecer en el presente….. de incluirte a ti y al otro en tu corazón.

Considera el intercambio sexual no solo como un evento físico, si no como un evento energético, como la vida. La vida es energía en constante movimiento dentro de un campo de consciencia. Tu , Yo, como seres humanos tenemos una forma física que le da cuerpo a este juego entre energía y consciencia.

Cuando se enciende la energía de atracción física, una energía de deseo muy poderosa, tan poderosa que crea vida, atrae a dos seres humanos irresistiblemente para cumplir con su propósito básico, que  es procrear y que se den las condiciones para crear y nutrir y amar lo creado en el más consciente de los casos .

Esta atracción irresistible, placentera y oprimente al mismo tiempo por su demanda y su intensidad tiene  fuerza propia. Es la fuerza que la vida precisa para iniciarse para cobrar forma, es el deseo de la vida por desplegarse.

En la adolescencia recibimos el chorro más fuerte de la vida en la zona sexual. Un chorro tan fuerte de energía procreadora que condiciona todo nuestro ser y nuestra identidad.Manejar y comprender esta energía creadora de una forma consciente es el viaje de cada ser humano.

La observación práctica del recorrido de la energía vital por la columna y por el sistema nervioso y glandular en general es una de las aportaciones del Tantra.

Tomar consciencia de la sexualidad como una poderosa energía creativa, está siendo uno de los temas más tabúes entre los humanos.

Las religiones han intentado restringir el instinto sexual a unos marcos familiares y con el solo propósito de la reproducción para evitar el maluso de esta fuerza tan poderosa y cegadora.

Sabemos que respondemos biológicamente al deseo de la vida de crear y perpetuarse,para los hombres se trata biológicamente de descargar la semilla necesaria para engendrar vida y para la mujer la energía para absorber esa semilla y gestar. Este deseo tan grande es generalmente inconsciente y responde a nuestra naturaleza mamífera.

Hoy en día, la reproducción no es tan necesaria, porque somos muchísimos y generalmente no nos encontramos para procrear si no para intercambiar gozosamente nuestra energía. Disfrutarnos del placer físico, de sentirnos amados y tocados de intercambiar energía, etc…

En este caso podemos usar ese mismo potencial de la energía sexual, en vez de para engendrar, para llenarnos de vida y de gozo, de amor, de creatividad y de éxtasis a nosotros mismos.

Muy pocas personas han descubierto todo el potencial y el beneficio energético del intercambio íntimo.

Generalmente nos encontramos y nuestra mayor preocupación esllegar al orgasmo y que el otro llegue al orgasmo, satisfacer y ser satisfecho. Además por desconocimiento asociamos  orgasmo con la eyaculación.

No nos damos cuenta que tener una meta como esa nos despoja de todo lo que este acto en si necesita para ser satisfactorio: Presencia, energía disponible y fluida, relajación, confianza y apertura.

Si durante el encuentro íntimo, sexual y emocional, tu consciencia está habitando el cuerpo y atento a que  esté relajado, esponjoso y permeable a ser  encontrado,  siempre habrá  más espacio para que la energía se expanda por el y se pueda fundir y circular con el otro.

En esa expansión se da un intercambio de energía entre dos seres que reflejan la totalidad de su potencial.

¿Que es exactamente un orgasmo?

La fórmula básica descrita por Reich para que suceda una liberación orgásmica es:

El cuerpo o una parte del cuerpo se carga de energía, cuando la carga es grande y empieza a tensarse comienza una respuesta de descarga que lleva a la relajación.

Durante el acto sexual, nos cargamos de energía y si no la liberamos inmediatamente con una descarga genital, clitoriana o eyaculando, estamos presentes en el sentir y nos relajamos antes de la descarga, permitimos que se expanda por todo el cuerpo, que recorra la columna y el sistema glandular. En el primer chakra, las suprarenales se expresan como excitación en el segundo chakra o centro sexual se expresa como placer y deseo, deleite en el contacto físico, en los olores, sensaciones corporales, sonidos del cuerpo, etc… en el tercer chakra zona del plexo solar se expresa como alegría, fuerza y empoderamiento, en el cuarto Chakra, corazón y pulmones, se expresa como amor y  profunda sensación de unión y de ahí se expande hacia las tiroides, abre la garganta con gran deleite y se funde en la pituitaria con una percepción extática de Todo lo que Es!

Todo es la misma energía, vibrando en diferente onda o filtrada por una diferente glándula y cada una destila su propio aroma cuando recibe la energía vital que libera el encuentro bioenergético entre dos polaridades opuestas como lo son el hombre y la mujer.

Así el encuentro no se queda solo en ese efímero roce sexual de pequeña carga y descarga que en general favorece más la naturaleza del masculino que del femenino.

Sentir  plenitud en el encuentro, eso que esperas pero pocas veces llega, depende  de cuanta energía vital eres capaz de sentir y sostener en el cuerpo relajadamente, depende de tu presencia y de tu entrega y de tu disponibilidad para fundirte.

Si estás muy tenso, enfocado en el resultado, cerrado a la intimidad, con el corazón acorazado o herido, desconectado de tu cuerpo y con mucha actividad mental, si sientes cosas que no te atreves a compartir, si no hay confianza, si juzgas tu cuerpo, si estas emocional, etc… es muy difícil que la energía se despliegue libremente por todo tu cuerpo.

Existe un elemento fundamental que el tantra toma en cuenta y es que la energía vital de un ser humano transcurre por un eje electromagnético que existe en cada ser humano y que hombres y mujeres portan esta carga electromagnética pero al revés, es decir :

La polaridad positiva, emisiva principal en una mujer es el corazón y los pechos que han de ser habitados para abrir su polaridad receptiva que es su vagina, su útero y prepararlo para recibir. Una mujer en contacto con el clima de amor está disponible para recibir al hombre.

La polaridad emisiva positiva principal del hombre es el pene que ha de ser habitado con consciencia y presencia para abrir su polaridad receptiva que es el corazón. Es la presencia individual en el momento que prepara al hombre para recibir a la mujer en el corazón. De esta manera en un intercambio íntimo al que le das tiempo, pones consciencia y relajación, empieza a circular la energía entre el hombre y la mujer creando un circuito que despierta la naturaleza orgásmica de ambos y genera, amor, salud, creatividad y una satisfacción profunda y celular muy distinta de la relajación que acontece después de un orgasmo tenso y rápido.

Para empezar y sin grandes complicaciones prueba y…

 La próxima vez que tengas un encuentro íntimo ten una actitud relajada, sin exigencias, mantén la atención dentro del cuerpo, escucha tu energía y estáte presente. Se honesto con tu amante, relajaos el uno con el otro. Pon el énfasis en Ser más que en Hacer. Todo lo demás permite que se dé por si mismo. ASTIKO

 

Articulo publicado en www.uakix.com en su  ESPECIAL SEXUALIDAD CONSCIENTE 2015/2016